¿Para qué sirve una lijadora eléctrica?
La pregunta es sencilla. Y la respuesta obvia es simple. Claro es que una lijadora sirve para lijar madera y metal, pero también pintura, masilla, plástico o incluso encimeras de piedra... Ahora bien: ¿es esa su única función?
Lijar sin polvo: la gran ventaja de la lijadora eléctrica
Es indudable que con lijadora eléctrica se lija más rápido que con tacos de lija y esponjas. El motor de la herramienta ayuda, pero como nos recuerda la fábula de la liebre y la tortuga, hay cosas más importantes que la velocidad.
Porque gracias a la lijadora puedes lijar sin sepultar en polvo la pieza lijada. O sin suspender partículas flotantes en el aire que respiras. ¡Y eso ya no está al alcance del taco de lija!
Hay muchos tipos de lijadoras para madera. También las lijadoras de pared se presentan en distintas formas. Muchas compiten entre sí por ser la que más volumen de polvo (o serrín) conduce hasta la bolsita, pero, en realidad, la forma más eficaz de lijar sin polvo es recurrir a la mejor amiga de la lijadora: la aspiradora.
Las aspiradoras para herramientas eléctricas tienen su propio enchufe. Al conectar la máquina a la toma eléctrica, la aspiradora sabe cuándo debe arrancar el motor. Es decir, cuando presionas el botón de la lijadora, el tubo flexible comienza a succionar; cuando la apagas, acto seguido lo hace la aspiradora.
Lijar rápido siempre es deseable... ¡Pero lijar sin polvo es impagable!
Vibrar, la función desconocida de la lijadora
Vamos ahora con un uso poco conocido de la lijadora, el de vibradora casera. Mosaicos hidráulicos, encimeras de piedra y fregaderos de cuarzo sintético tienen algo en común: no son materiales baratos. Por eso hay manitas que se fabrican estas piezas de obra con un molde casero. En él vierten —para gusto los colores— hormigón, cemento pigmentado, resina, etc.
Pues bien, nada mejor que la lijadora eléctrica para vibrar las paredes del molde y facilitar que el material llegue hasta los huecos más recónditos. Por cierto, ello te sirve a la vez para quitar burbujas de aire. Y es que si el material no llena todo el molde... tu trabajo es en balde.
En suma, una lijadora eléctrica tiene tantos usos como quieras darle. ¿O acaso se usa el taladro solo para perforar? Si la taladradora eléctrica tiene usos sorprendentes, difíciles de imaginar a priori, la lijadora no quiere a ser menos.
Ahora es vuestro turno. ¿Qué uso poco ortodoxo le dais a la lijadora eléctrica? ¡Esperamos vuestros comentarios!
