Cómo usar la radial con seguridad
Antonio cortaba un tornillo con la radial. Lo sujetaba con la mano izquierda mientras manejaba la máquina con la derecha. El disco estalló. Varios fragmentos se incrustaron en su antebrazo y sufrió cortes en la muñeca.
Laura usaba en un tejado la amoladora angular para cortar rastreles de madera. Montó para ello un disco de corte para madera. La hoja tropezó con un nudo y la radial retrocedió bruscamente. Laura perdió el control de la máquina y se rompió una pierna al caer de la cubierta.
Antonio y Laura son personajes ficticios. Pero accidentes de este tipo ocurren todos los días. Los accidentes de ambos ejemplos eran evitables. ¿Cómo prevenir riesgos al trabajar con amoladoras angulares? Responder a la pregunta es el propósito de este artículo.
- La máquina
- Los riesgos de accidentes asociados al uso de la radial
- Las medidas de prevención
- Área de trabajo
- Elección de la máquina
- Elección del accesorio, velocidad máxima y diámetro
- Estado del accesorio
- Montaje del accesorio
- Ajuste de la guarda o cubierta protectora de la radial
- Empuñadura auxiliar
- Sujeción de la pieza
- Abrir o cerrar el corte
- Sobresfuerzos y esfuerzos laterales
- Uso de líquidos refrigerantes
- Postura
- Trabajos en altura
- Cadenas, ropa suelta y otros complementos
- Puesta en marcha de la máquina
- Parada de la amoladora
- La protección individual (EPI)
- Conclusión
- Glosario
- Referencias
La máquina
La amoladora angular o radial es una herramienta eléctrica (a veces, neumática) que sirve para cortar, pulir y desbastar. Desempeña la tarea un accesorio montado en ángulo recto respecto al motor. Ejemplos: disco abrasivo, plato de lijar, muela de vaso, cepillo, etc.
La máquina incluye cuando menos dos mecanismos de seguridad: el escudo ajustable y el mango auxiliar. Puede presentar otras medidas de prevención, como la protección antirrearme (que impide la puesta en marcha automática tras un corte de luz).
Los riesgos de accidentes asociados al uso de la radial
Hay que dejarlo claro desde el principio. La radial es una máquina tan peligrosa como necesaria.
Sin considerar los relativos a la fuente de energía —electricidad o aire comprimido—, existen varios tipos de riesgo ligados al uso de la amoladora:
- exposición a ruido y vibraciones
- inhalación de polvo (del propio accesorio o del material de trabajo)
- quemaduras por incendios de materiales inflamables causados por chispas o calor
- daño ocular por proyección de partículas o fragmentos de disco
- cortes en cualquier parte del cuerpo por contacto directo con la herramienta abrasiva o partes proyectadas de esta tras su rotura
- caídas y golpes por pérdida de equilibrio debida a retrocesos bruscos de la máquina
- trastornos musculoesqueléticos (TME) en la espalda, el cuello, los hombros y las extremidades
Las medidas de prevención
Para facilitar las cosas, y con el ánimo de no aburrir, clasifico las medidas de prevención de riesgos relativas al uso de amoladoras en apartados independientes que pueden leerse en cualquier orden.
Las siguientes secciones tratan desde cómo elegir y montar el accesorio hasta la forma de posar la máquina una vez hecho el trabajo.
Área de trabajo
Las amoladoras angulares despiden chispas y generan calor. Para prevenir el riesgo de incendio, el área de trabajo debe estar libre de suciedad y materiales inflamables.
Elección de la máquina
La amoladora se selecciona según el trabajo que ha de desempeñar. Se tendrán en cuenta el diámetro del disco, la potencia del motor, el número de revoluciones, la fuente de energía y los posibles mecanismos de protección (como el control de vibraciones) a la hora de elegir la máquina.
Elección del accesorio, velocidad máxima y diámetro
El accesorio, ya sea disco abrasivo, muela, cepillo, plato de lijar, etc., debe ser apto para la tarea que se lleva a cabo. Algunas características del accesorio, como la composición del abrasivo, dependen material que se trabaja. Otras del modelo de máquina: diámetro, medida del husillo de rosca, etc.
En esta sección hay que poner de relieve la importancia de que la velocidad máxima del accesorio debe ser mayor que la de la amoladora. Por ejemplo, un disco abrasivo de 12 250 RPM no podrá usarse en una radial que gira a 18 000 RPM.
Por último, nunca se montarán accesorios no admitidos por el fabricante de la máquina.
Por ejemplo, los manuales de instrucciones de las amoladoras suelen prohibir de forma expresa el uso de discos de talla de madera con dientes, eslabones de cadena, etc. La razón de ello es su alto riesgo de contragolpe y el riesgo, por tanto, de perder el control de la herramienta.
Estado del accesorio
Todo disco abrasivo se puede romper cuando la máquina gira a la máxima velocidad.
Una posible causa de rotura son defectos internos (daños de fábrica) del disco. Otra es que este haya sido sometido a golpes o sobresfuerzos. Almacenar el accesorio en condiciones ambientales adversas es una tercera.
Por ejemplo, la estructura interna del disco podría tener resquebrajaduras por haber sido expuesto a la humedad, primero, y haberse congelado, después, con el consecuente aumento de volumen del agua absorbida.
Así pues, otra medida de prevención importante es examinar el estado del accesorio en busca de grietas, partes sueltas, holgura, etc. Es importante asimismo almacenar los discos en un lugar seco.
Montaje del accesorio
Si el accesorio lo incluye, es vital respetar el sentido de rotación. En tal caso la flecha del disco debe coincidir con la flecha del cabezal de la amoladora.
Además, una vez enroscado este o apretada la tuerca de sujeción, se ha de girar a mano el accesorio para comprobar que lo hace libremente. Es decir, no debe rozar con el escudo protector (ni con otra parte de la carcasa).
Ajuste de la guarda o cubierta protectora de la radial
La cubierta protectora en media luna de la radial, en primer lugar, desvía partículas proyectadas (polvo, chispas) y las aleja del usuario. En segundo lugar, protege contra la rotura espontánea del disco, al detener, o al menos frenar, fragmentos rotos que por su inercia se proyectan a gran velocidad.
Por tanto, nunca debe desmontarse dicho escudo. Ni para mejorar la visión de la línea de corte. Ni para mejorar el acceso al trabajar en lugares reducidos. Además, los 180º de la caperuza se deben orientar de tal manera que aseguren la máxima protección del usuario.
La siguiente foto muestra lo que NO debe hacerse:
Por el contrario, en la siguiente imagen se aprecia la posición correcta de la guarda:
Empuñadura auxiliar
Las fotos anteriores sirven también para ilustrar la forma correcta de sujetar la radial. No importa el tamaño. Pequeña o grande, la amoladora debe sujetarse por la base del cuerpo con una mano y por la empuñadura auxiliar con la otra.
Para ello es posible cambiar de posición el mango auxiliar de la máquina. Por otra parte, las amoladoras para rebajar materiales de construcción duros (como el hormigón) disponen de empuñaduras adaptables. Un ejemplo es la empuñadura de estribo o abrazadera puente, anclada en dos soportes de la máquina.
Sujeción de la pieza
La pieza trabajada no debe moverse de modo imprevisto durante la operación.
Se aseguran las piezas pequeñas en el tornillo de banco o con mordazas de presión. También es importante inmovilizar y equilibrar piezas grandes pero ligeras (o inestables). Se pueden usar para ello mordazas, sargentos, cuñas, tornillos de apriete, etc.
Abrir o cerrar el corte
Mención especial merecen las piezas largas.
Por poner un ejemplo, cuando se corta por el medio un tubo hueco sujeto por ambos extremos, la parte central se hunde. De resultas, el corte se cierra y se forma una suerte de V invertida cuyo vértice (es decir, los laterales cortados de la pieza) atrapa y tiende a frenar el disco.
Las consecuencias pueden ser nefastas si se llega a bloquear el disco (rotura, reacción brusca de la máquina, etc.). Para evitarlo se han de colocar los soportes de manera que las dos piezas resultantes mantengan su posición una vez cortadas.
En la foto de abajo, el corte no tiende a cerrarse, sino a abrirse (puesto que se ha dispuesto un apoyo bajo el corte y ninguno en el extremo que queda al aire). En todo caso, aún sería mejor si la parte volada del perfil también contase con soportes.
Sobresfuerzos y esfuerzos laterales
Solo ciertos accesorios soportan esfuerzos laterales.
Los discos de corte que incluyan el símbolo o la indicación NO apto para desbaste no se someterán a esfuerzos laterales o de torsión, pues existe un gran riesgo de rotura debido a su flexibilidad y delgadez.
En cuanto a los sobresfuerzos, se evitará presionar en exceso el disco.
La presión excesiva puede ocurrir de forma inconsciente al acelerar la operación por trabajar apurado. De resultas, aparte del riesgo de rotura, y lejos de ganar velocidad, se pierde rendimiento, el accesorio y el material se sobrecalientan y se acumulan tensiones que pueden desencadenar accidentes.
Uso de líquidos refrigerantes
No se deben usar agua ni líquidos refrigerantes con discos de corte en seco.
Postura
Llegados a este punto cabe preguntarse: ¿cómo se sujeta una radial? ¿Cómo hay que colocar el cuerpo?
En primer lugar, como ya se ha dicho antes, la radial se sujeta firmemente con ambas manos.
En segundo lugar, se han de evitar posturas en las que la radial quede por encima de los hombros. Sostener así la máquina dificulta su control. Y, como consecuencia de una reacción imprevista, se pueden sufrir lesiones en la cara, los brazos, el cuello, etc.
En tercer lugar, se debe adoptar una posición corporal defensiva. El cuerpo debe resistir las fuerzas contrarias resultantes de un posible retroceso brusco de la máquina, una reacción de torsión, etc. La posición de los brazos y las piernas juega aquí un papel fundamental.
Trabajos en altura
En trabajos en altura con la amoladora se agravan las consecuencias de un posible accidente. Se tendrá presente, siempre que exista riesgo de caída, la posibilidad de perder el equilibrio por una reacción inesperada de la radial.
En tejados, andamios, plataformas elevadas, etc., se llevará puesto un arnés anticaída. Además, se asegurará la máquina con una cuerda y un mosquetón para impedir que caiga y ocasione daños a terceros.
Cadenas, ropa suelta y otros complementos
Para evitar el riesgo de atrapamiento, no se llevará ropa suelta, cadenas ni otros complementos que puedan engancharse en el disco en rotación. Asimismo, el pelo largo debe llevarse recogido.
Puesta en marcha de la máquina
Antes de usar la máquina se espera a que el motor alcance la máxima velocidad. Hay que evitar ponerse en el plano de rotación mientras este acelera.
La finalidad de esta medida de prevención es no estar presente en la trayectoria del disco en caso de que este se rompa, ya sea por desgaste, tener grietas, defectos internos, etc.
Parada de la amoladora
Se ha de parar totalmente la amoladora antes de posarla. Soltar la radial sin detenerla conlleva riesgos como dañar el disco o la reacción imprevista de la máquina. En este aspecto las radiales con freno eléctrico son más seguras y convenientes.
La protección individual (EPI)
Con todo, las medidas de prevención anteriores son insuficientes para eliminar totalmente los riesgos derivados del trabajo con radiales. Esto obliga a usar equipos de protección individual. La siguiente tabla resume los EPI más importantes según la naturaleza del riesgo.
Riesgo | Causa | Equipos de protección individual (EPI) |
---|---|---|
Daños oculares | Proyección de partículas y fragmentos | Gafas de protección. Pantalla facial |
Daños al rostro | Proyección de partículas y fragmentos | Pantalla facial |
Daños respiratorios | Inhalación de polvo (del accesorio o el material de la pieza) | Mascarilla de protección respiratoria |
Cortes y golpes en las manos | Contacto con el disco. Retroceso brusco de la máquina. | Guantes de protección contra riesgos mecánicos |
Quemaduras en las manos | Superficies calientes. Fuego por vapores y materiales inflamables | Guantes de protección térmica |
Daños auditivos | Ruido de la máquina, resonancia y vibración de la pieza | Protección auditiva |
Daños al torso | Proyección de fragmentos de disco | Delantal de trabajo |
Conclusión
Por ser sumamente versátil, la radial es una herramienta esencial en la construcción, el sector del metal y el bricolaje. Los riesgos asociados a su uso se deben tanto al material trabajado (metal, hormigón, piedra, barro cocido, plástico) como a la propia herramienta, con la posible rotura del disco abrasivo como peligro siempre presente.
Conocer los peligros asociados al tipo de accesorio de la radial, el manejo de la máquina y la sujeción de la pieza de trabajo es esencial para prevenir accidentes. Por su parte, EPI de distintas categorías protegen contra riesgos inevitables: exposición al ruido, inhalación de polvo, etc.
Glosario
- Contragolpe
- Reacción de retroceso de la máquina que sucede cuando se bloquea el accesorio en rotación. El útil frena de repente y puede hacer perder el control de la herramienta eléctrica. Esta sale despedida en sentido opuesto al giro del accesorio.
- Guarda
- Protector o carcasa protectora en forma de media luna que en la amoladora angular desvía la trayectoria de las chispas para alejarlas del usuario. Algunas guardas incluyen flancos que bloquean también las partículas impulsadas de manera perpendicular al plano de giro.
- Husillo
- Tornillo metálico que emerge del engranaje angular de la amoladora y que pasa a través del útil, en el caso de discos, o va enroscado en este, en el caso de cepillos, muelas y platos de lijar. El calibre de rosca de estos últimos debe coincidir con la rosca del husillo (M14, por lo general).
- Tuerca de sujeción
- Pieza con rosca hembra que se gira, con la ayuda de una llave, sobre el husillo para inmovilizar el disco.
- Tuerca rápida de sujeción
- Tuerca de sujeción que se aprieta con la mano (sin necesidad de herramientas).