¿Qué diferencia hay entre un rotomartillo y un martillo demoledor?
¿En qué se diferencia el rotomartillo del martillo demoledor? La diferencia en lo técnico es que el primero tiene función de rotación como denota su nombre, no así el segundo.
Es decir, puedes llevar a cabo varias tareas con el rotomartillo; en cambio, con el martillo de demolición solo podrás cincelar. Pero cabe aclarar varios matices.
El rotomartillo
La mayoría de modelos de rotomartillo incluye un selector de modo que te permite desempeñar tres tareas: taladrar con percusión (giro más golpeo), taladrar sin percutor (solo giro) y cincelar (golpeo sin rotación). Por el contrario, el martillo demoledor solo trabaja como percutor.
Así pues, desde el punto de vista de la funcionalidad, el rotomartillo es una herramienta más versátil. Por este motivo, también es conocido como martillo perforador combinado. Y, por su parte, al martillo demoledor se lo suele llamar martillo picador.
El martillo demoledor
A pesar de lo dicho, que el martillo demoledor solo tenga función de cincelado no significa que quede restringido a tareas de demolición. Porque también puedes excavar y compactar tierra si compras el accesorio SDS-Max apropiado.
Por supuesto, ¡tales tareas también las efectúa el martillo perforador combinado!
Accesorios para rotomartillos y martillos demoledores
Por todo lo dicho, en un rotomartillo puedes montar cualquier tipo de útil. Esto incluye los que requieren rotación, como brocas convencionales o coronas diamantadas.
Al contrario, en el martillo picador solo puedes usar accesorios que funcionen únicamente por percusión: punteros, cinceles, palas de excavar, cortadoras de asfalto, pisones para compactar tierra, útiles de abujardar piedra...
¿Cuál es mejor? El rotomartillo contra el martillo de demolición
A la hora de comprar un martillo, debes saber que la diferencia de precio entre las dos máquinas puede ser considerable. Uno de los factores que influye en el precio de los martillos (y quizá el más influyente) es la energía de impacto. Este valor se expresa en julios. Cuanto mayor sea la fuerza del golpe, mayor será la tasa de arranque del material.
¿Y si la fuerza de impacto entre dos máquinas es similar? En tal caso el rotomartillo suele ser mucho más caro que el demoledor. Esto es así porque tiene más componentes internos (mecánica de giro del eje acoplada al motor, entre otros). Por el mismo motivo, el martillo combinado conlleva un mayor riesgo de averías.
¿Cuál es más seguro? La diferencia de precio entre el rotomartillo y el picador no solo se debe a la rotación, sino también al embrague electromecánico de seguridad. Que existe por una buena razón: el par de apriete o torque del rotomartillo llega mucho más allá que el del taladro percutor.
Así, la alta fuerza torsional del martillo, vital para perforar materiales duros como el hormigón, supone un riesgo para ti. A saber: la máquina girará con brusquedad si la broca se bloquea. Tal riesgo no existe en el martillo demoledor. Por ello, como medida de seguridad, ciertos rotomartillos añaden el referido embrague mecánico para limitar el par de giro y evitar así lesiones de muñeca y antebrazo.
Conclusión
En síntesis, si solo vas a cincelar, compra un martillo demoledor. Por otro lado, si hay reformas a la vista, tal vez quieras comprar un rotomartillo. Nunca es mala idea porque, a fin de cuentas, ¡es una herramienta más versátil!
Muy buen articulo. Resolvió todas mis dudas.
Muy buen artículo, como siempre, es la única página que nunca defrauda.
Muy buena explicación, aunque me gustaría profundicen sobre cuál sería la potencia idónea que debemos usar, ya que en el mercado existen algunos rotomartillos desde 1100 W hasta 1700 W. Es lo que veo en Perú.
Hola, Marco:
En efecto, existen rotomartillos pequeños y ligeros para pequeñas obras, y máquinas más potentes para tareas pesadas de demolición, perforar en hormigón con grandes brocas, etc. ¿Cuál elegir? Pues depende del trabajo que se vaya a hacer. La potencia no es la mejor de las características para compararlos (la energía de impacto, medida en julios, es más eficaz).
No obstante, los martillos menos potentes (desde 650 W) van bien para demoler azulejos colocados a la antigua (con pegotes), abrir huecos en pared de ladrillo o perforar en hormigón con brocas pequeñas (12-15 mm). Taladrar en concreto con broca de mayor diámetro requiere más potencia: 800 W (28 mm), 1100 W (40 mm). Para abrir rozas en hormigón o demoler pavimentos gruesos y revestimientos duros (porcelánico) pegados con los actuales morteros cola, lo mismo: se necesitan rotomartillos potentes.
Espero haberte orientado. Saludos.
Compré el rotomartillo Bosch GSB 12 52 DV para trabajos duros. Mi consulta es que tan efectivo sería para hacer también trabajos de cincelado, porque me indicaron que no es recomendable para tal trabajo. ¿Hasta qué tipo de materiales podría demoler con su función de cincelado?
Hola, Alfredo:
Bosch 12-52 DV es una muy buena máquina. Su energía de impacto (19 J) coincide con la del 12-52 D, que es el mismo pero sin control de vibraciones. El uno y el otro son los rotomartillos más potentes de Bosch con cabezal SDS-Max.
Dices que te han dicho que el 12-52 DV no es recomendable para cincelar... Sin embargo, para encontrar una herramienta superior, en cuanto a energía de impacto, hay que irse ya a martillos como el GSH 16-30 (de 41 J) o el GSH 27 VC (de 62 J), ambos para accesorios hexagonales, o bien el GSH 11 VC (de 23 J) con cabezal SDS-Max, pero todos ellos demoledores y, por tanto, sin función de rotación.
Tu rotomartillo sí es apropiado para cincelar, cuando menos, en todo tipo de trabajos horizontales, y también verticales, a menos que la tarea exija por volumen de trabajo un martillo demoledor como los que te comento. Para que te hagas una idea, Bosch considera el GSH 27 VC apto para demoler 10 toneladas diarias de hormigón (y habla de 13 toneladas en el GSH 13-30).
En resolución, la limitación de tu herramienta no es tanto el tipo de material, pues todos los martillos nombrados son aptos para demoler hormigón, piedra, ladrillo, etc. (paredes, forjados, losas, cimientos), sino la cantidad de kg que debas demoler por hora. Si hablamos de cincelado vertical constante, y muy intenso, por ejemplo, en obra pública (y no en residencial), ahí sí te recomiendo cambiar de herramienta.
Saludos.